La
vida en el planeta Tierra se debe a la importante existencia de las plantas. Sin embargo, ¿sabemos por qué son realmente tan importantes?
En
todos lados existen plantas (entre ellas podemos mencionar a los árboles, flores, etcétera), pero no
sólo cumplen con la sencilla misión de adornar ciertos lugares, sino que son las
encargadas de mantener la vida en nuestro planeta gracias al proceso de la
fotosíntesis.
La
fotosíntesis consiste en que las plantas utilicen el material orgánico del
medio ambiente para después convertirlo en oxígeno, elemento clave para nuestra
existencia.
Desgraciadamente,
los humanos no hacemos conciencia sobre ello y existe el grave problema de la
deforestación de árboles para adquirir bienes humanos (como muebles, hojas de
papel, etcétera).
Año
con año, muchos árboles son talados, desapareciendo a la vez miles de hectáreas
de bosques. Pero no sólo los árboles son los perjudicados, las flores también
corren con la misma suerte, ya que son utilizadas para crear ramos florales o
simplemente algunos espacios florales desaparecen a manos del hombre para
construir edificios u otras estructuras.
¡Estamos matando nuestro propio oxígeno! Y lo triste es que la gente asegura que no se puede hacer nada. ¡Están equivocados! Claro que sí existe una solución: la reforestación.
Así es. Reforestación, un asunto que a todos debería de importarnos.
Sin embargo, y lamentablemente, no es así. En nuestro mundo, millones de
hectáreas son destruidas debido a incendios, la tala inmoderada o la ampliación
de ciudades.
La reforestación es una práctica que busca repoblar de árboles los lugares en los que solía haberlos, pero que por distintas circunstancias ya no los hay. Algunos de los motivos por los que en algunos lugares es necesaria la reforestación son:
• Explotación de la madera para fines industriales y/o para consumo.
• Ampliación de la frontera agrícola o ganadera.
• Incendios forestales (intencionales, accidentales o naturales).
• Ampliación de la frontera agrícola o ganadera.
• Incendios forestales (intencionales, accidentales o naturales).
Se le llama también reforestación, aunque sería más correcto forestación, a la plantación de árboles en áreas donde éstos no existieron por mucho tiempo.
Para la reforestación, deben utilizarse árboles de crecimiento rápido, así el resultado es favorable y ayuda a diversas actividades. La reforestación puede promover la educación ambiental, crear consciencia ecológica y sensibilizar a las personas de lo que está ocurriendo en nuestro planeta.
Claro que, como todo, la reforestación tiene su lado negativo, y un ejemplo de ello es que cuando se plantan los árboles, el suelo puede perder su humedad, o la tierra puede verse afectada. Por supuesto, esto ocurre con las reforestaciones de ciclo corto, ya que con las de ciclo largo es muy difícil que se noten los cambios en la tierra.
Aún así, la reforestación es importante, ya que los árboles son los pulmones de nuestro planeta y nos proporcionan el oxígeno que necesitamos para vivir. Además de éste, la reforestación puede tener otros objetivos como:
• Proteger al suelo de la erosión.
• Producción de madera para fines industriales y uso doméstico.
• Frenar el avance de las dunas de arena.
• Producción de madera para fines industriales y uso doméstico.
• Frenar el avance de las dunas de arena.
Algunas cosas que nos han ayudado mucho, son las mismas
leyes de nuestro país, aunque hay muchísima gente que no cumple con ellas, por
desgracia. La ley dice que cuando cortas un árbol, es tu deber plantar dos o
tres, precisamente para evitar que se acaben.
El humano simplemente no es capaz de comprender todo el daño
que en verdad le está causando a nuestro planeta, nuestro único hogar.
Pongámonos a pensar en cuántos árboles y flores desaparecen al año a manos de la especie humana, cada centenar de árboles talados o flores cortadas. Se pierde oxígeno, y puede que en algún futuro no muy lejano, la vida se extinga a consecuencia de la falta de oxígeno, debido a la escasez de plantas.
Tenemos que
estar más atentos de lo que pasa a nuestro alrededor, obviamente no porque haya
incendios u otros desastres es cuando debemos reforestar, también podemos
hacerlo en otros sitios donde se necesiten árboles.
Así
que, hagamos conciencia, ¡y manos a la obra! Plantemos más árboles y flores
para que generen oxígeno puro, evitemos la deforestación de árboles. Dejemos
que el verde puro lleno de vida invada nuestro planeta Tierra. Si trabajamos juntos, ¡podemos lograrlo!
- Karina Cantú Escobedo.
- Lilia C. Aguilar Saucedo.
- Betsy Denia Ramírez Martínez.
- Claudia Marisol Ibarra Puente.
- Mónica Jazmín Cerda Corona.
- Betsy Denia Ramírez Martínez.
- Claudia Marisol Ibarra Puente.
- Mónica Jazmín Cerda Corona.
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